Un colchón no es solo el instrumento donde te tumbas por las noches después de un duro día de trabajo y te permite descansar, lo cierto es que esconde muchos secretos que repercuten en tu calidad de vida.
Algunas de las curiosidades que mostramos a continuación pasan desapercibidas por los usuarios, aunque influyen directamente en la calidad del sueño y en el descanso:
1) Despídete del estrés
Las preocupaciones no dejan dormir bien, es fácil decir que tenemos que dejarlas a un lado, pero muy pocas veces podemos conseguirlo. Un buen colchón contribuye a que alcances el nivel de relajación necesario para que puedas dormir profundamente.
Los mejores colchones para ello son aquellos que tienen espuma en la parte inferior, ya que consiguen que la presión del cuerpo se elimine y en su lugar aumente el confort.
2) ¿Lana y algodón?
Que los colchones cuenten con la última tecnología es un factor vital si se quiere disfrutar de un descanso placentero. La lana y el algodón son dos fibras naturales que forman parte del colchón pero que muy poca gente conoce que están ahí. Su función es la de regular la temperatura y permitirte dormir tranquilo en cualquier época del año.
3) Tecnología
A la hora de escoger un colchón este debe adaptarse completamente a la posición de tu espalda, para que se encuentre de la forma más correcta y elimine los puntos de presión que hacen que la sangre no circule bien. Existen muchas tecnologías que se encargan de esto, pero eres tú quien escoge la que más se adapte a tus características y necesidades.
4) Mejor descanso
No eres tú quien debe adaptarse al colchón, es él quien debe enseñarte a dormir mejor por las noches para poder tener una vida activa cuando despiertes. Todas las prestaciones se tienen en cuenta para mejorar la calidad del sueño y seguir unas pautas que contribuyan a ello.
En Gorricho somos conscientes de que un descanso saludable mejora tu calidad de vida, motivo por el que ofrecemos a nuestros clientes los mejores colchones gracias a nuestros más de 40 años de experiencia en el sector.